rehabilitación y kine

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jueves, 19 de junio de 2014

Desarrollo Motor Normal durante el Primer Año de Vida

Neonato: 1 a 10 días
El neonato de término muestra actividad flexora fisiológica en tobillos, rodillas, caderas, y codos.
La flexión es observada tanto en prono como en supino.
Prono: Peso desplazado hacia la cara del bebé, la cual se encuentra desplazada hacia un lado.
Es capaz de levantar la cabeza y girarla hacia el lado contrario.

Habitualmente esta actividad se acompaña con un marcado pataleo de las extremidades  inferiores. (Esto es un paso temprano en el desarrollo de la extensión antigravitatoria y desplazamiento de peso)
Supino: Muestra flexión fisiológica en las extremidades, pero no está presente el control antigravitatorio de los flexores de cuello. Por lo general, mantiene la cabeza rotada hacia un lado, y es capaz de pasar por la línea media brevemente.
Al traccionar al bebé a sedente, se nota el poco control antigravitatorio de los flexores de cuello, ya que no son capaces de acompañar el movimiento y levantar la cabeza en contra de la gravedad.
Sedente: Manifiesta falta de control muscular de tronco. Su espalda es redondeada y su cabeza  cae hacia adelante, sin embargo puede levantarla momentáneamente, y luego cae.
Bípedo: Muestra sus capacidades de bípedo primario y la marcha automática, pero estos reflejos desaparecen gradualmente entre la 4ta y 6ta semana.

2 Meses
Caracterizado por una semi hipotonía (tono bajo), flexión disminuida y aumento de la extensión y asimetría.
Supino: incremento del rango de rotación de la cabeza, rotación externa de hombro y rotación externa de cadera.
La cabeza rota más hacia los lados a  causa de la gravedad e incremento de la actividad unilateral de los extensores de cuello, sin balance con los flexores de cuello. Aparece el reflejo tónico cervical asimétrico (RTCA). Clásica reacción de extensión del brazo del  lado facial y flexión del brazo en el lado craneal. Esta reacción generalmente es momentánea. 

Bípedo: Presenta astasia-abasia (descoordinación motora y mala orientación de los pies). La marcha automática ya no está presente.

3 Meses: Comienzo de la simetría activa y control bilateral de músculos de cuello y tronco. Comienza la orientación de cabeza, ojos y manos a línea media.
Prono: La extensión de cabeza/cuello junto con extensión de tronco superior, permiten al bebé levantar y girar su cabeza. Comienza a cargar peso en sus antebrazos, levantando la parte superior del pecho de la superficie de apoyo. Los pectorales aducen el humero y estabilizan los brazos sobre el tronco mientras que el peso se sitúa sobre los antebrazos. 

Supino: Evidente incremento de simetría, aparece el mentón aproximado al pecho (chin tuck). El contacto y exploración de manos sobre cuerpo y mano con mano son etapas importantes para el incremento de conciencia corporal. 
Las extremidades inferiores asumen posición “patas de rana”, con caderas en flexión, abducción y rotación externa, con rodillas en flexión.

Sedente: Puede mantener la cabeza levantada con hiperextensión de cuello.  Generalmente estabiliza la cabeza con elevación escapular. Requiere sostén completo para sentarse.
Bípedo: carga peso en sus pies, ya ha pasado la fase de astasia-abasia.  Las extremidades inferiores están abducidas y las rodillas están rígidamente extendidas.

4 Meses: Es un mes de fuerte simetría. Hay control simétrico bilateral de los músculos flexores y extensores de cuello y además hay un balance entre estos músculos, lo que le permite al bebé mantener el control de cabeza en línea media en prono, supino y sedente.
Prono: Se mueve hacia un patrón de extensión completa, lo que demuestre incremento del control muscular extensor del bebé. Esta extensión es reforzada por una aducción escapular bilateral, la que también se ve en sedente, bípedo y marcha iniciales.
La fuerte extensión simétrica en prono es balanceada por la carga de peso simétrica sobre los antebrazos. Los músculos pectorales aducen los brazos en línea con el tronco. La aducción activa de hombros ayuda a facilitar la contracción de los músculos abdominales y la flexión de cabeza. Esto permite al bebé aproximar el mentón hacia el pecho (chin tuck) y elongar el cuello.

El bebé juega alternando activamente la inclinación de pelvis entre ante y retroversión. La anteversión pélvica va acompañada de extensión lumbar, flexión de cadera, flexión de rodilla y de rodilla y plantiflexión de tobillo.
Su  postura en prono es con las piernas en posición de rana (flexión, abducción y rotación externa de caderas).
El bebé puede rotar de manera accidental hacia un lado mientras carga peso en antebrazos.
Supino: Muestra un incremento en el control de la actividad muscular flexora. El bebé levanta la cabeza, brazos y piernas para alcanzar sus rodillas con las manos. La  posición manos-rodillas le permite explorar su cuerpo y aumentar la conciencia corporal. Frecuentemente, el bebé gira hacia un lado al llevar sus manos a las rodillas. Generalmente el giro es iniciado con la rotación de la cabeza, manteniendo  la simetría en decúbito lateral.
Tracción a sedente: inicia la elevación. Levanta la cabeza simétrica, levanta la pelvis con sus abdominales, flexiona los codos, caderas y rodillas.
Sedente: Debe ser sostenido en sedente, ya que todavía carece de control de tronco y pelvis.
Bípedo: Carga peso en sus pies, hay un aumento en el control de tronco y pelvis.

5 Meses: Es importante ya que emergen las capacidades de desplazamiento lateral de peso, reacción lateral de enderezamiento de cabeza y columna, y disociación de extremidades superiores e inferiores.
Prono: puede mantener la carga de peso sobre los antebrazos y con codos extendidos. Comienza a desplazar peso lateralmente respondiendo con flexión lateral, lo que le permite alcanzar con una mano mientras estabiliza sobre un hombro.
El aumento en control de la cintura escapular y de tronco permiten al bebé desplazar su peso en la pelvis y sobre los antebrazos para realizar alcance con un brazos. Cuando el peso del bebé se desplaza hacia un lado, su hombro no colapsa y ya no cae como ocurría a los 4 meses. Esto proporciona un estímulo de enderezamiento lateral de la abeza y tronco en el lado opuesto al que carga peso. Por lo tanto se elonga el lado que carga peso.
La flexión lateral de columna facilita el ascenso de la pelvis, lo que facilita una reacción de equilibrio en la pierna del lado que no carga peso. Además, esto facilita el movimiento disociado entre ambas extremidades inferiores.
A los 5 meses, el bebé logra el giro de prono a supino, todavía es accidental , por lo tanto, la mayoría no lo practica voluntariamente.
Supino: el incremento en el control abdominal le permite al bebé levantar sus piernas llevando sus pies hacia sus manos y boca.
Desde supino, el bebé gira a decúbito lateral, y logra una postura de flexión lateral. El bebé flexiona lateralmente su cabeza en sentido opuesto al suelo, elongando el lado del tronco que está sobre el suelo. La pierna que queda abajo está extendida y aducida, y la otra está flexionada y abducida. El bebé muestra un aumento en el control de la flexión lateral y en la disociación de las extremidades inferiores.
Tracción a sedente: Lo realiza con mucho más control, pero todavía necesita asistencia para completar la acción.
Sedente: El bebé continúa inclinándose desde las caderas hacia adelante. Todavía el control extensor de caderas no es suficiente para estabilizar la pelvis en posición vertical en sedente. Se apoya con las manos en esta posición, esto le proporciona estabilidad al tronco. La estabilidad postural también se logra con aducción escapular bilateral simétrica, la cual es llamada “posición en guardia alta”.
Bípedo: utiliza una fuerte extensión de rodillas para levantar su cuerpo. Debe ser sostenido en bípedo pero carga todo el peso en sus piernas.

6 Meses: El bebé tiene buen control de cabeza, además se aprecia un aumento en el control de la cintura escapular, observado al realizar alcances y en la extensión protectora anterior. El control y movilidad de tronco también han aumentado, por lo que se observan más movimientos laterales de columna.
Prono: Fuerte actividad extensora, pero balanceada por la actividad flexora. Tiene suficiente control de la cintura escapular para desplazar pero sobre codos extendidos y realizar alcances hacia adelante. Pero por lo general, regresa a cargar peso en antebrazos durante el desplazamiento de peso.
Supino: Posee el suficiente control para levantar su pelvis y piernas, y mantenerlas extendidas sobre su cuerpo. También puede alcanzar sus pies y jugar con ellos en rangos medios.
Puede girar de supino a prono. Este movimiento secuencial es iniciado con flexión, ya sea de extremidades inferiores o de cabeza. Cuando llega a decúbito lateral hay una transición a flexión lateral con elongación del lado que carga peso. El enderezamiento lateral facilita la disociación de extremidades inferiores. Al continuar la transición a prono la extensión se vuelve el componente dominante.
Sedente: Es capaz de sentarse independientemente mientras mantiene la espalda recta con chin tuck. El incremento en el control extensor de cadera ayuda a estabilizar la pelvis del bebé en una posición perpendicular. 
Bípedo: Carga peso con ambas piernas. Tiene adecuado control de tronco y caderas para sostenerse independientemente afirmándose de una persona u objeto firme. Puede pararse y rebotar hacia arriba y abajo con sus pies apoyados en el suelo. El rebote también proporciona estimulación propioceptiva y vestibular.

7 Meses: Comienza a realizar desplazamientos de peso en sedente. A menudo están presentes las reacciones protectoras extensoras hacia los lados. A los 7 meses, su control de tronco en sedente es suficiente para permitir que el bebé pueda disociar las extremidades inferiores del tronco, por lo tanto, cuando está sentado, comienza a intentar varias posiciones de sus extremidades inferiores.
Prono: Esta es la posición más funcional del bebé a los 7 meses. Desde el prono, puede pasar a cuadrúpedo. En un comienzo esta transición se realiza a través de desplazamiento lateral de peso, disociando las extremidades inferiores, elevando la pelvis sobre la pierna flexionada, y extendiendo codos para levantar el cuerpo a cuadrúpedo. Esta posición transitoria es a veces llamada posición de “maratón”.
Cuando el bebé asume la posición cuadrúpeda, se puede percibir una lordosis lumbar. Esta ocurre cuando los músculos abdominales no están suficientemente activos. A menudo la estabilidad inicial en la posición cuadrúpeda es mantenida por una fuerte contracción de los flexores de cadera.
Desde cuadrúpedo, el bebé puede pasar a sedente. Esta transición se inicia generalmente con un desplazamiento lateral de peso, reacción de balance de flexión lateral de tronco y disociación de extremidades inferiores.
Sedente: Comienza a usar la rotación de tronco, que generalmente es iniciada por la visión (cabeza, cuello, tronco, pelvis y fémur). El peso es desplazado hacia el lado facial.
Bípedo: Puede tratar de ponerse de pie desde la posición cuadrúpeda, colocando sus manos sobre un objeto firme, elevando y extendiendo su tronco. Aunque las extremidades inferiores del bebé sostienen su peso, él depende de sus extremidades superiores para la estabilidad y control. Mientras está de pie, flexiona y extiende activamente sus piernas. Sin embargo, todavía no es capaz de realizar desplazamientos laterales de peso, por lo tanto no levanta una u otra pierna.

8 Meses: El control de tronco ha mejorado en sedente, utilizando sus extremidades inferiores con menor frecuencia para estabilidad posicional.
Sedente: Frecuentemente se siente con rodillas extendidas (long sitting) y caderas aducidas en linea con el cuerpo, o con una pierna con rodilla extendida y la otra flexionada (posición de semianillo). 
Puede usar reacciones protectoras con extremidades superiores cuando estas son necesarias.
Puede realizar la transición de sedente a cuadrúpedo y regresar de cuadrúpedo a sedente.
Utiliza el gateo como principal medio de locomoción. El gateo recíproco ocurre cuando ya tiene suficiente control para sostener la contrarotación de cintura escapular y pelvis.
Bípedo: Realiza transiciones desde cuadrúpedo a arrodillado o semi-arrodillado frente a un mueble, para llegar a estar de pie. Sigue dependiendo de sus extremidades superiores para realizar la mayor parte del alzamiento.
En bípedo, puede realizar marcha lateral, apoyándose de muebles. 
 Marcha: Cuando ambas manos del bebé son sostenidas, el bebé camina hacia adelante usando marcha en “stepagge”. Levanta cada pierna con una amplia abducción, rotación externa y flexión.

9 Meses: es muy funcional en sedente siendo capaz de cambiar frecuentemente sus posturas en sentado.
Sedente: varía la posición de sus piernas desde sentado con rodillas extendidas, a sentado lateral y sentado en “W”. Rota de manera independiente externa e internamente cada pierna con mínimas reacciones asociadas en el resto del cuerpo.
Puede moverse rápida y fácilmente desde sedente a cuadrúpedo, y viceversa. El gateo es su principal medio de locomoción independiente. 
Bípedo: desde arrodillado puede pasar a semi-arrodillado y traccionarse a bípedo. Aunque todavía usa sus extremidades superiores para equilibrarse y ayudarse, sus piernas se están volviendo más activas y fuertes.
El trepado es un gran objetivo para  los bebés, utilizando la disociación de extremidades superiores e inferiores.

10 Meses: Continúa practicando las habilidades aprendidas en meses anteriores. Las habilidades motoras finas de la extremidad superior se vuelven más refinadas, pero cuando el bebé intenta nuevas habilidades motoras finas, regras a una posición motora gruesa más estable.
Bípedo: realizando la marcha lateral, el bebé de diez meses continúa incrementando su rotación de tronco sobre la pierna que carga peso. Al realizar marcha lateral alrededor de los muebles, el bebé utiliza una sola mano para estabilizarse, mientras gira y mira a la dirección en la cual se está moviendo.
El aumento de control en la musculatura de las extremidades inferiores permite al bebé descender al suelo estando de pie frente a un mueble. 
Marcha: al ser sostenido de ambas manos, el bebé camina hacia adelanta con menos abducción de caderas, mayor extensión de caderas, mayor rotación pélvica y mayor longitud del paso.

11 Meses: Aumento de la exploración, utilizando su control motor y movilidad en numerosas maneras.
Puede ponerse de pie frente a un mueble extendiendo activamente sus piernas, en lugar de traccionarse con los brazos. Al tener las extremidades inferiores más activas, puede cambiar de posición de forma más fluída.
Marcha: ahora al caminar sostenido de una o ambas manos, el bebé tiene suficiente control de tronco para asistir activamente con el desplazamiento de peso del tronco inferior/extremidades inferiores. Al caminar, utiliza mayor rotación pélvica respecto a la que usaba a los diez meses.
La postura en guardia alta es dominante cuando el bebé intenta caminar de manera independiente, utilizándola para incrementar la estabilidad de tronco. 

12 Meses: tiene suficiente control de tronco para realizar flexión lateral y rotación de tronco como también flexión y extensión. Tiene facilidad para moverse desde y hacia el sedente, y realizar transiciones en preparación para levantarse.
La posición de arrodillado es utilizada con frecuencia.
Puede ponerse de pie usando solo sus extremidades inferiores. Pasando por la secuencia de arrodillado, semi-arrodillado, desplazamiento de peso hacia adelante, cuclillas y luego extensión simétrica de ambas extremidades inferiores.
Marcha: puede desplazar lateralmente su peso y levantar las piernas alternadamente. Este desplazamiento de peso es generalmente acompañado de aducción escapular (guardia alta) y extensión de tronco. Se mueve rápidamente al caminar, ya que no ha desarrollado aun el equilibrio y control necesarios para moverse lentamente.
A medida que incrementa el control de tronco, la aducción escapular ya no es necesaria y los brazos del bebé cuelgan a su lado.

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